En un post pasado hablábamos de cómo definir el Cliente Ideal. ¿Pero qué pasa cuando quieres venderle a otras empresas?

Realmente no se aleja mucho del perfil del cliente ideal. Lo vas a notar en los siguientes puntos:

  • Es una empresa que ha identificado un problema y está dispuesta a pagar para resolverlo. ¡Muy importante! Es sencillo: si no lo ven como un problema urgente no van a tener interés en resolverlo. Por ejemplo, puede que hagas páginas web y hayas identificado que X empresa tiene una página desactualizada y caótica; pero es posible que a esa empresa le importe más la relación offline con sus clientes y por eso no le interesa mejorar su presencia online.
  • Los beneficios:
    ¿Cómo se va a beneficiar esta empresa de usar tu producto/servicio? Puedes ayudar a conseguir más clientes, ahorrar en gastos, incrementar su productividad… Enfócate en el valor, no en el precio.
    – ¿Por qué debería escogerte a ti y no a la competencia?
    – Y no olvides: ¿cómo se beneficia tu negocio de trabajar con esta empresa? Esto es una relación gana-gana.
  • ¿A qué sector del mercado pertenece? (Por ejemplo tecnológico, belleza, transportes, etc).
  • ¿A qué nicho se dirige?
  • ¿Cuál es el tamaño de la empresa? ¿Número de empleados? ¿Ingresos anuales?
  • ¿En qué lugar(es) se ubica? (Países, ciudades).
  • ¿Quién es la persona responsable de tomar las decisiones estratégicas en la empresa? Importante porque, al final de cuentas los negocios se hacen entre personas. Tu tarea es ponerte en el lugar de esta persona que ahora es tu cliente ideal.

Este es un tema del que estaremos hablando en posts futuros. ¿No te lo quieres perder? ¡Suscríbete!